Serie: Rosario de Joyas del Budismo

                                               Conquista el odio y la arrogancia

      El odio es un estado mental muy destructivo ya que consume fácilmente una gran cantidad de energía positiva y destruye el merito acumulado. Sucumbir al odio y persistir en actitudes perniciosas crea enemigos y hace crecer inútiles sufrimientos a nuestro alrdedor. Su antídoto es la paciencia. El odio es la causa que nuestra apariencia sea desagradable, nos afea, incluso fisicamente, su antidoto es la PACIENCIA. que por el contrario nos embellece. Responder con Paciencia ante personas o situaciones irritantes pacifíca el odio.

Hemos de recordar que el enemigo que nos irrita, actúa impulsado por su odio y, esclavizado por esta aflicción mental carece de libertad, por lo tanto, ¿porqué enfadarse con él cuando no es libre de sus actos?

       El orgullo o la arrongancia es un factor mental que hincha desproporcionadamente un aspecto particular propio desvirtuando la relación con los otros seres. Si creemos dominar bien algún campo de conocimientos, ya sea material o espiritual, fácilmente podemos ser presa de este tipo de engaño, por eso debemos siempre recordar que sólo somo aprendices de la vida, nunca Maestros de nada, siempre abra alguien o algo que nos seguira enseñando.

      El orgullo que surge al comprender que realmente podemos trabajar para alcanzar un estado desde el cual beneficiar a los demás es el llamado orgullo Divino de un practicante tántrico. Puesto que no proviene de una mente engañosa no se le puede considerar negativo.